Sin dudafue un momento que quedó (y quedará) grabado en la mente de los integrantes de aquella selección y de todo Costa Rica: la ejecución del último penal de la tanda ante Grecia, por los octavos de final del Mundial de Brasil 2014, en los pies de Michael Umaña, que al encajar la pelota en la red catapultó a los ticospor vez primera a la ronda de los mejores ocho.
Aún seis años después, quien culminó dicha proeza recuerda con emoción aquel suceso, que sin dudas marcó no solo su carrera como futbolista, sino también su vida como nacido en suelo tico.
“Fue algo que me marcó, al igual que toda mi familia, y también a todo ese grupo que hizo posible llegar a ese Mundial”, comenzó explicando el jugador en diálogo con Everardo Herrera. Luego, continuó: “Ojalá podamos seguir repitiendo este tipo de actuaciones en Copas del Mundo”.
Más adelante, acentuó con afecto: “Fue un momento histórico, uno de los días más felices,que me marcará hasta el último día de mi vida”. Sin embargo, no se atribuye toda la gloria: “Fue un esfuerzo de todos. Pudimos anotar los penales y Keylor detener uno”.
Luego, compartió: “Me siento muy feliz de poder formar parte de ese equipo y hacer felices a los costarricenses”. Finalmente, indicó: “En otras partes del mundo siempre me recuerdan el penal, fue el momento más importante de mi carrera “.