Hubo goles, hubo lujos y hubo lucimiento individual, pero tras la goleada ante Estados Unidos los jugadores ticos coincidieron en que la unión hace la fuerza.
La derrota en la Copa América Centenario era una espina para un grupo de futbolistas que hicieron del orgullo deportivo una de las claves del éxito. Por ello, no sólo estaban en juego tres puntos muy importantes para proyectar una clasificación al Mundial, sino también la necesidad de mostrar que de ninguna manera en Estados Unidos se juega al fútbol mejor que en Costa Rica.
Para cobrarse revancha, los ticos dejaron de lado el individualismo y sacaron a relucir toda la fortaleza y el talento de un grupo que ya supo hacer historia pero que no se conforma. El resultado quedó a la vista con la goleada contundente y con una tabla de posiciones que los mostrará, por lo que queda del año, como únicos líderes del Hexagonal Final.
“No importan los nombres, porque todos estamos listos”, expresó Johan Venegas, quien inició como titular tras ser suplente ante Trinidad y Tobago y fue el encargado de abrir la goleada ante Estados Unidos.
En la misma tónica, Joel Campbell aseguró que “fue un partido completo para todo el equipo”, mientras que Umaña agregó que el triunfo es “de todo el grupo”.
Claro que en todo grupo que se precie de tal también debe haber quien ponga los pies en la tierra para no confiarse en el futuro, y de ello se encargó Celso Borges al señalar que “con seis puntos no se clasifica”.