La pandemia no es la única tragedia que azota a la población hondureña. La inseguridad sigue más latente que nunca y los delicuentes siguen saliendo a la calle, pese a la cuarentena decretada entodo el país. Los asaltos se están volviendo más violentos y la mayoría de los malvivientes empezaron a entrar a las casas para llevarse cosas. Con la gente en sus hogares por el coronavirus, no pueden seguir asaltando en la calle como lo hacen usualmente.
Una de las víctimas en estos últimos dias fue Óscar Cacho. El se formó en las inferiores de Marathón pasó por el Sula de Lima y por el Villanuevade la Liga Ascenso de Honduras. Se terminó alejando del fútbol y se dedicó a atletismo. Logró la medalla de plata haciendo 800 metros planos en los Juegos Universitarios Centroamericanos en Nicaragua. Actualmente, es muy conocido por sus masivas clases de Zumba.
Cacho fue asaltado mientras se encontraba en su casa. Ladrones intentaron ingresar, el buscó la manera de impedirlo y fue baleado por uno de ellos. Por suerte, la bala no ingresó directamente en la pierna del deportista, sino que lo lastimó de forma superficial. Los maleantes huyeron, tras disparar y la policía llegó a los pocos minutos para asistirlo. Desde su cuenta de Facebook, Óscar contó lo que sufrió y compartió fotos de su herida.
El ex-futbolista escribió en su red social: “Ayer se quisieron meter a mi casa yo estaba afuera en el porch y me dispararo salí corriendo para otro lado pero me dieron en la pierna señores tener cuidado con esto de la crisis los ladrones estan asaltando y metiéndose a los locales también. Yo vivo en recidencial pero se saltaron el muro. Estoy bien gracias a Dios pero es bueno que sepan y no tentar al diablo Dios nos cubra de la pandemia y de las personas que hacen el mal”.
Casi de milagro, este asalto terminó sin grandes complicaciones para el deportista. Su vida corrió mucho riesgo y pudo haber recibido la bala directamente en la pierna, herida que podría acabar con su carrera. Este es uno de los muchos casos de inseguridad que se está viviendo en Honduras y es otra pandemia que el gobierno nacional debe controlar. La gente no puede quedarse tranquiliza en su casa si sabe que cualquier delicuente puede ingresar a sus hogares.