La Liga busca que el jugador morado, autor de los dos únicos goles del Saprissa en la victoria 2-5 del fin de semana, sea ahora castigo por el escupitajo que le habría lanzado intencionalmente a su rival.
En una carta, el director deportivo de los rojinegros, Agustín Lleida solicitó iniciar un proceso disciplinario a Ramírez por su acto, teniendo en cuenta que la supuesta agresión no fue consignada en el informe arbitral del partido.
Alajuelense cita el artículo 36 del Reglamento Disciplinario que menciona las faltas graves y que incluye dentro de estas la de escupir a un jugador, estableciendo además que quien incurra en algo así tendrá una suspensión de 6 a 8 partidos. Este sería el castigo que el club manudo pretende que le sea aplicado al presunto agresor.
Ramírez había admitido que sí lanzó un escupitajo en el minuto 85 del clásico, como se aprecia claramente en la transmisión de televisión. Sin embargo, desmintió a Júnior Díaz al decir que no le había caído al jugador rival.