Históricos futbolistas de El Salvador han dejado su huella como legionarios en el extranjero. El caso más emblemático es el de Jorge Mágico González, quien marcó una época en el Cádiz y que estuvo a punto de ponerse la camiseta del FC Barcelona. Hasta fue reconocido por la leyenda argentina, Diego Maradona, que creía que el nacido en San Salvador era mucho mejor que él.

El Mágico no fue el único. Hubo grandes jugadores que supieron construir su historia en otros clubes como el caso de Mauricio Cienfuegos, hoy una gran leyenda de Los Ángeles Galaxy. Sin embargo, solo uno tiene el honor de ser el primer legionario en la historia de El Salvador.

El primer legionario en la historia de El Salvador

Se trata de Ricardo Saprissa, nacido en la ciudad de San Salvador el 24 de junio de 1901. Con tan solo tres años, viajó a España para instalarse en la ciudad natal de su familia, Barcelona. Desde entonces, tuvo una carrera increíble en más de un deporte.

No solo se dedicó al fútbol, sino que también Saprissa fue un gran tenista. Fue parte de los Juegos Olímpicos de París 2024 como español. Además, jugó al hockey hierba y al béisbol.

Su gran trascendencia se dio en el fútbol, cuando hizo sus primeras apariciones en la academia del Espanyol. Su talento lo llevó a formar parte del primer equipo, donde pudo jugar la Copa del Rey y la primera temporada de la liga española. Supo ser campeón del campeonato de Cataluña, que se jugaba de manera no oficial.

Saprissa con la camiseta del Espanyol.

Se convirtió en uno de los grandes referentes del Espanyol y llegó a ser el capitán de la escuadra. En 1932 disputó su último partido luego de estar 10 años en el conjunto catalán. Por si fuera poco, nunca cobró por sus servicios en el club azul. Luego arribó a Costa Rica, donde un club recibió el nombre de Deportivo Saprissa FC con el fin de que Ricardo lo patrocinara.