Este jueves, la periodista argentina Ariana Isasi compartió una entrevista exclusiva con Keylor Navas. El guardameta de Newell’s Old Boys recibió a la comunicadora en su casa del exclusivo barrio Kentucky Club, en Rosario, para una conversación de más de media hora en la que repasaron diversos aspectos de su presente y su pasado.

Como no podía ser de otra manera, hacia el final de la charla, se tocó el tema que todos querían escuchar: ¿volverá el histórico portero de 38 años a defender el arco de la Selección de Costa Rica?

Keylor confirma la charla que tiene en vilo a Costa Rica

Miguel “Piojo” Herrera, actual entrenador del equipo nacional, ha sido claro al respecto: nadie tiene la puerta cerrada, pero antes que nada quiere tener una conversación sincera con Keylor para entender por qué decidió dar un paso al costado.

Sobre esa posibilidad, el ex Real Madrid no se anduvo con rodeos. “Yo le agradezco al entrenador todo lo que ha dicho. Cuando me retiré de la Selección, estaba en una etapa bastante complicada de mi carrera, tanto futbolística como personal. La mente no alcanzaba para más”, confesó.

“Hoy estamos en una situación muy diferente, pero sí es verdad que necesito hablar con el entrenador y ver qué cosas podemos ver del futuro de la Selección. Por ahora, estamos aquí, disfrutando de mi vuelta”, agregó.

“¿Le cerrás la puerta a la Selección?”: la respuesta de Keylor Navas

En su siguiente pregunta, Ariana Isasi fue directamente al grano: “Entonces, ¿no le cerrás la puerta a la Selección?”. Y la respuesta del tico fue medida: “No la cierro, pero no está abierta, está ahí a lo que Dios quiera. La verdad que estoy en una etapa en mi vida donde, gracias a Dios, estoy feliz y quiero seguir feliz. Entonces, vamos a ver qué pasa”.

Por ahora, todo parece depender de esa charla pendiente entre el Piojo Herrera y Keylor Navas. Mientras tanto, el arquero disfruta de su presente en Rosario, donde la hinchada de Newell’s lo arropa con cariño cada fin de semana. Y él responde como siempre: con atajadas de élite y una presencia bajo los tres palos que sigue siendo imponente.