Este viernes, la Federación Costarricense de Fútbol oficializó la salida de Gustavo Alfaro como entrenador de la selección nacional, poniendo fin a semanas de especulación.

Tras pasar nueve meses en el cargo, la Federación Paraguaya de Fútbol ejecutó la cláusula de rescisión de Alfaro, quien tenía contrato con el combinado nacional hasta 2026.

Alfaro se hace cargo de una selección en crisis

Ahora, el técnico argentino de 61 años se enfrenta a un nuevo y complicado desafío al tomar el timón de una selección que atraviesa un mal momento en su camino hacia el Mundial 2026.

Alfaro se une a una escuadra paraguaya que actualmente ocupa el séptimo lugar entre las diez selecciones que disputan las eliminatorias de la CONMEBOL para el certamen que se celebrara en Norteamérica.

Alfaro se mete en una situación complicada (Getty).

Con un rendimiento por debajo de las expectativas, la Albirroja está lejos de asegurar uno de los seis cupos directos al Mundial. La situación es crítica, y Alfaro deberá trabajar contrarreloj para intentar revertir el rumbo de un equipo que no ha mostrado la consistencia necesaria en los últimos partidos.

El calendario de pesadilla con el que Paraguay recibe a Alfaro

El panorama se torna aún más oscuro cuando se observa el calendario que le espera a Paraguay en la próxima doble fecha de eliminatorias. El 6 de septiembre, la selección guaraní visitará al peligroso combinado uruguayo.

Cuatro días después, el equipo de Alfaro recibirá a Brasil, una de las selecciones más temibles del mundo y habitual dominadora de las eliminatorias sudamericanas.

Para salir bien librado de esta doble fecha letal, el ex DT de Costa Rica deberá poner en marcha rápidamente un plan de acción efectivo. La presión es enorme, y cualquier tropiezo podría complicar aún más las aspiraciones de Paraguay de clasificar al Mundial 2026.