Este lunes 21 de abril el fútbol de Costa Rica vivirá una jornada cargada de emoción. A partir de las 8:00 p.m. (hora de Centroamérica), el Estadio Alejandro Morera Soto será el epicentro de dos sucesos trascendentales: el clásico nacional entre Liga Deportiva Alajuelense y Deportivo Saprissa, y el esperado regreso de Óscar “Machillo” Ramírez al banquillo rojinegro luego de siete años sin dirigir.
La vuelta del estratega más ganador en la historia del club fue anunciada con entusiasmo por parte de la institución manuda tras el despido de Alexandre Guimaraes el pasado Jueves Santo. Desde entonces, Ramírez solo ha contado con los tres días festivos del fin de semana para preparar el choque ante su eterno rival.
“Excelente”: Alajuelense confirma el cambio que todos pedían
En medio de la euforia por el retorno del Machillo, Alajuelense decidió llevar adelante un cambio de rutina que era muy reclamado por los aficionados rojinegros.
En lugar de entrenar en el Centro de Alto Rendimiento (CAR), como es habitual, el equipo realizó su última práctica antes del encuentro con Saprissa en el mismo césped del Morera Soto.
El club compartió imágenes del entrenamiento en sus redes sociales, donde se pudo ver a los jugadores junto a Ramírez y sus asistentes, Wardy Alfaro y Bryan Ruiz.
En los comentarios, los hinchas dejaron en claro su aprobación ante la medida: “Excelente en el estadio y no en el CAR, así se les baja un poco la fama y entrenan humildemente”, escribió un usuario manudo con un deje de ironía. “Entrenen más en el estadio”, agregó otro. “Me parece muy bien que lo hagan en el estadio y no en el CAR”, sumó un tercero.
Un clásico que lo define todo
En lo deportivo, Alajuelense llega al clásico en la tercera posición con 34 puntos, pero con Cartaginés igualando esa línea al recibir los tres puntos por la descalificación de Guanacasteca, el margen es mínimo.
Además, una derrota ante Saprissa permitiría que el equipo de Paulo Wanchope —que actualmente se encuentra fuera de la zona de clasificación— los alcance en la tabla. Con este panorama, ambos equipos están obligados a ganar.