Los directivos del club germano habían hecho la promesa de regalarle eso a los aficionados en caso de lograr el objetivo y lo cumplieron.

El St. Pauli es uno de los clubes más peculiares del fútbol moderno. Tiene una ideología política de izquierda y milita a favor de los desfavorecidos.

Y en una acción bastante ocurrente, los dirigentes había prometido regalarle a los aficionados 1000 litros de cerveza en caso de que evitaran el descenso a la tercera categoría alemana.

Finalmente, tras el empate por 1-1 ante el Greuther Fürth, el equipo finalizó noveno, con 42 unidades en la tabla, y la comisión organizó el evento con las bebidas prometidas y un concierto, donde también participaron los jugadores.