Alajuelense comenzó su participación en el Torneo de Verano 2017 con derrota como local 2-1 ante Santos de Guápiles.
La Liga ingresó en un terreno peligroso, desde hace algún tiempo ya, donde las ideas se nublan ante la necesidad y desesperación por conseguir resultados inmediatos. En el inicio de un nuevo campeonato, una buena cantidad de gente concurrió, con ilusiones renovadas, al Morera Soto; pero a la hora de abandonar el estadio la sensación era la de casi siempre: decepción.
La presencia de Benito Floro en el banco de suplentes de Alajuelense provocó tanto ruido que incluso muchos se olvidaron de que la directiva casi no fichó para rearmar un equipo del que partieron muchos y otros tantos mostraron ya no estar listos para asumir el protagonismo.
Pero las acciones comenzaron favorables para los Manudos ante Santos de Guápiles, porque José Luis Cordero, único refuerzo estelar, abrió el marcador a los 10 minutos con un muy buen cabezazo al poste más lejano del portero, tras un centro preciso de Luis Sequeira.
Por inexperiencia de muchos de sus futbolistas, Alajuelense no supo cómo manejar el partido tras ponerse en ventaja y tras ceder la posesión del balón terminó encontrándose ante el empate de Santos cuando se jugaba un minuto de adición en la primera mitad. Tiro libre de Wilmer Azofeifa y cabezazo de Cunningham para poner el 1-1.
Todo se derrumbaría para Benito Floro y sus muchachos a falta de 13 minutos para el final, cuando el físico ya había pasado factura, y en un nuevo balón parado, tras varios rebotes, Leonardo Adams definió desde el área chica para estampar el 2-1 definitivo para los de Guápiles.