Mientras en Los Angeles, California, la Selección de México se consagraba ganadora del Final Four de la Liga de Naciones Concacaf tras vencer agónicamente 2-1 a Panamá, en Costa Rica reinaba la tranquilidad.
La Tricolor, dirigida por Miguel “Piojo” Herrera, ya había hecho su trabajo goleando 7-0 a Belice en la ida del repechaje por la Copa Oro 2025, y ahora solo espera cumplir con el trámite de la vuelta este martes 25 de marzo en el Estadio Nacional. Lejos de los reflectores de la final, el Piojo aprovechó la oportunidad para mandar un mensaje que no pasará inadvertido.
La filosa respuesta del Piojo Herrera
Consultado en conferencia de prensa sobre si Costa Rica puede considerarse la tercera mejor selección de Concacaf, el mexicano fue tajante: “Yo no pondría a Costa Rica en un tercer puesto y lo dije desde que llegué aquí. Costa Rica es una selección extraordinaria”,
“Fuera de su país, Costa Rica es el mejor ranqueado en un Mundial. Este equipo estuvo a punto de ganarle a Panamá, se pierde aquí, pero se empata allá 2-2”, sentenció Herrera, dejando en claro que, en su opinión, la historia mundialista pesa más que cualquier ranking FIFA.
Aunque Panamá, que participó de una sola Copa del Mundo en toda su historia, está por delante en la clasificación actual de la FIFA —puesto 36 contra el 54 de los ticos—, para el Piojo eso no dice toda la verdad.
Un mensaje para los grandes de Concacaf: prepárense
Además, el estratega de 53 años agregó que en la Copa América pasada vio a una Costa Rica sumamente competitiva, y se mostró optimista con lo que se viene: “Fue un equipo sólido, con buen plantel, y creo no estar muy lejos de lo que se está viendo. Ya competiremos en otro torneo y estaremos listos para competirles a esos equipos al mismo nivel”, aseguró, con un mensaje directo a los gigantes del área.
Costa Rica formará parte del Bombo B para el sorteo de la Copa Oro 2025, lo que garantiza que se enfrentará en fase de grupos a uno de los cabezas de serie: México, Estados Unidos, Canadá o Panamá. Un cruce inevitable que podría poner a prueba las palabras de Herrera en apenas unas semanas.