Durante su reciente visita a El Salvador en el marco del Concacaf Access, el conocido presentador y relator de ESPN, Fernando Palomo, compartió sus reflexiones sobre el estado actual del fútbol salvadoreño. En una intervención en el programa Frente a Frente de TCS, abordó varios aspectos que considera críticos para el desarrollo del deporte en el país.

Uno de los puntos destacados por Palomo fue la situación que enfrentó el fútbol salvadoreño en 2020, cuando estuvo al borde de una posible suspensión por parte de la FIFA. En este sentido, expresó su preocupación por los peligros que representa una suspensión para el futuro del deporte en el país, afirmando que sería un golpe devastador para el fútbol salvadoreño.

¿Sigue la posibilidad de que El Salvador sea suspendido por FIFA?

Fernando Palomo aclaró que la situación todavía no se encuentra calmada y existe la posibilidad real de que suceda. Además, advirtió que no tiene nada positivo que esto suceda y que terminaría por destrozar a un fútbol salvadoreño muy golpeado.

Ese peligro no ha pasado. Muchos creen que la suspensión es beneficiosa, quien así lo crea le invito que nos tomemos un café sin azúcar y hablemos de todos los peligros que una suspensión representa para el fútbol de cualquier país, pero en especial el de El Salvador”, declaró el periodista.

Fernando Palomo en contra de la intervención del gobierno de Bukele a la Fesfut

Pese a que Palomo hizo hincapié en la necesidad de realizar cambios significativos en la forma en que se gestiona el fútbol en El Salvador, se opuso fervientemente a la intervención estatal. Aseguró que no tiene nada realmente positivo y que podría asesinar al fútbol cuscatleco.

El periodista aseveró: “Lo otro nos va a matar (en referencia a la inverción del gobierno), futbolísticamente nos va a matar, que FIFA venga y suspenda será la muerte de un deporte que está ahora moribundo y aquello será un golpe definitivo”.

Para finalizar, Palomo defendió a los jugadores: Los futbolistas en El Salvador hoy en día son tratados como empleados informales, no están protegidos por las leyes del trabajo, los contratos terminan cuando los dirigentes quieren y pretendemos después de esto que un entrenador venga y solucione”.