Este sábado, en los Juegos Olímpicos de París 2024, el nadador de Costa Rica Alberto Vega vivió un momento inolvidable tras su participación en la prueba de 400 metros libres.
Aunque su destacada actuación no fue suficiente para avanzar a la final, ubicándose en el tercer puesto de su heat clasificatorio, la verdadera sorpresa llegó al término de la competencia.
Un encuentro histórico
Al concluir la prueba, Vega se dirigió a la zona mixta, donde fue recibido por una de las más grandes leyendas del deporte costarricense: Sylvia Poll. La emoción del joven nadador fue evidente al ver a la medallista olímpica, quien en 1988 hizo historia al convertirse en la primera costarricense en ganar una medalla olímpica, obteniendo la plata en los 200 metros libres femeninos en Seúl, Corea del Sur.
“Sylvia, Sylvia Poll. ¡Qué orgullo! Yo conozco a su hermana, pero a usted no”, exclamó Vega con entusiasmo, evidenciando la admiración que siente por la ex atleta.
Sylvia Poll, junto a su hermana Claudia Poll y Sherman Guity, forman el selecto grupo de medallistas olímpicos de Costa Rica. Además, Sylvia mantiene varios récords nacionales en las categorías femeninas de 50 y 100 metros libres, así como de 100 y 200 metros dorsal.
Una actuación destacada
A pesar de no haber avanzado a la final, Alberto Vega demostró una notable mejora en su rendimiento. El tico logró superar su marca personal, establecida en 4:04.30, redondeando una gran presentación que refleja su arduo trabajo de preparación para la cita olímpica.
El próximo miércoles 31 de julio a las 3 a.m. (hora de Centroamérica), será el turno de la nadadora costarricense Alondra Ortiz en la prueba de 200 metros mariposa.