La Comisión de Arbitraje ha encendido las alarmas entre los seguidores de Saprissa y su capitán, Mariano Torres. Todo se debe a que han designado a Pablo Camacho como árbitro central para el clásico del sábado, 2 de noviembre, contra Alajuelense.
La elección trae un trasfondo polémico, ya que este árbitro y el capitán morado han protagonizado momentos tensos en el pasado reciente. El argentino deberá cruzarse con un juez principal con el que no han tenido una gran relación cuando se cruzaron.
¿Qué problema hubo entre Mariano Torres y Camacho?
La situación se remonta a la jornada 7, el 24 de agosto, cuando Mariano Torres fue expulsado por Camacho en el partido contra el Cartaginés, un incidente que tuvo graves consecuencias para el jugador argentino, quien recibió una sanción de cinco fechas.
El informe arbitral de aquella jornada describe la expulsión de Torres con un tono severo, explicando que fue expulsado “por conducta violenta al lanzar el balón con fuerza excesiva contra un miembro del cuerpo técnico del equipo adversario“.
Además, el informe detalla que Torres se resistió a abandonar el campo y dirigió palabras duras al árbitro, gritándole “sos un sinvergüenza”. Estas acciones no solo le costaron una tarjeta roja, sino una suspensión que afectó notablemente su participación en el torneo, un hecho que aún resuena en la memoria del capitán de Saprissa y de los aficionados.
La designación de Camacho para el clásico contra Alajuelense no parece ser una coincidencia, y la tensión es palpable tanto en los fanáticos como en el propio Torres, quien se verá en la incómoda situación de ser juzgado nuevamente por un árbitro con el que tiene un historial complicado.
¿Quién acompañarán a Camacho en el clásico?
Los nombres de Carlos Fernández y Jeriel Valverde como jueces de línea, junto con Jonathan Leitón como cuarto árbitro y la novedad de un quinto réferi, refuerzan la intención de la Federación de que este partido esté controlado de principio a fin. Además, el equipo del VAR estará liderado por Marianella Araya junto a Yazid Monge, lo cual representa una capa adicional de vigilancia en un duelo que promete ser intenso en cada aspecto.