La participación de la boxeadora transgénero Imane Khelif en el mundo del boxeo ha generado una gran polémica. La argelina, que ha sido sometida a pruebas de ADN, ha sido excluida del Mundial debido a sus elevados niveles de testosterona. Esta situación ha puesto en el centro del debate la inclusión de atletas trans en el deporte femenino y las dificultades que enfrentan para competir en igualdad de condiciones.
El caso de Lin Yu-Ting, quien tampoco pudo participar en el Mundial por motivos similares pero sí lo hará en los Juegos Olímpicos, evidencia la falta de coherencia en las regulaciones y las desigualdades que enfrentan las atletas trans. Por lo que esto trajo repercusiones en el mundo del deporte y la boxeadora de Costa Rica Yokasta Valle se pronunció en sus redes sociales.
La polémica se centró en la argelina, a la cual se la acusaba de ser una mujer “trans”. Es decir, que nació biológicamente como hombre y que cambió de género porque se percibía como mujer. Pese a que se aseguró esto, realmente no es lo que sucedió.
El mensaje de Yokasta Valle en sus redes
A través de las redes sociales y tras los diversos relatos con esta polémica, la boxeadora de Costa Rica, Yokasta Valle, se pronunció al respecto poniéndole “100% de acuerdo” a una publicación del periodista especializado en boxeo Salvador Rodríguez.
“Ya el boxeo es lo suficientemente duro como para que todavía el COI obligue a las peleadoras a competir con desventaja. Hoy por fortuna Angela Carini decidió abandonar ante Imane Khelif, porque hace unos meses así terminó Brianda Cruz. Aquí hay golpes, no goles” , fue el texto que aprobó Yokasta Valle en sus historias de Instagram.
La exclusión de Imane Khelif del Mundial de boxeo ha generado un profundo impacto en la comunidad deportiva y ha reavivado el debate sobre la participación de atletas trans en las competiciones femeninas.
Dicha decisión de excluir a Khelif, basada en sus niveles de testosterona, ha sido cuestionada por activistas y deportistas que defienden el derecho de las personas trans a competir en la categoría que corresponda con su identidad de género.