El LASK de Andrés Andrade no la está pasando nada bien contra el Tottenham, por la primera fecha del Grupo J de la Europa League 2020/21. El elenco austríaco llegó a la media hora de partido con un 0-2 abajo, y una inferioridad en el campo de juego que es notable desde todo punto de vista.

Para infortunio del legionario panameño, el segundo gol de los ingleses estuvo en sus pies. El español Sergio Reguilón había hecho una gran jugada individual, recortando desde su izquierda hacia el centro en el borde del área, aunque acabó abriendo la pelota para Gareth Bale. El galés la pasó al medio para la entrada de Carlos Vinicus, aunque el centroamericano acabó empujándola en el recorte.

Si bien el LASK ha tenido algunas oportunidades en el ataque, lo cierto es que ha primado la voluntad del Tottenham, quien causa constante peligro en las filas defensivas de la visita (con un esquema que tampoco lo favorece, teniendo en cuenta que los centros llueven ante lo compacto que es el planteo en la zaga).

En el segundo tiempo la ecuasión no mutó, y fueron los dueños de casa quienes impusieron su ritmo y sus términos de juego. La entrada de Heung Min-Son, cuya velocidad lo identifica, no hizo más que complicar la tarea de los austríacos. El coreano, cabe destacar, fue el autor del 3-0 final.

Pero para el complemento ya Andrés Andrade no estaba en el campo de juego. Tras ingresar a las duchas, tomó su rumbo a las gradas, siendo reemplazado por Marvin Potzmann. Algunos errores en su labor y poca eficacia en las tareas que debía desenvolver, sin mencionar el autogol, cierran un jueves negro para el panameño.