Joshua Canales, hondureño-costarricense que recientemente debutó en la Liga MX con el Querétaro, fue convocado por Fabián Coito para los amistosos que la Selección Sub-23 catracha mantendrá frente al combinado tico, en vistas del Preolímpico de la Concacaf rumbo a los Juegos de Tokio 2020. Esto le da un cierre parcial a la dicotomía del muchacho que involucró a ambos países, la cual parecía tener al joven defendiendo los colores azul; rojo y blanco como claro final.

Es uno de los siete mediocampistas llamados por el entrenador uruguayo, junto a José Pinto (Olimpia); Alejandro Reyes (Real España); Jonathan Núñez (Motagua); Joseph Rosales (CAI); Kervin Arriaga (Marathón) y Carlos Argueta (Vida). Además, es de los pocos legionarios del plantel, junto al mencionado Rosales; Enrique Facussé (Universidad de Kentucky); Denil Maldonado (Everton de Chile); Juan Obregón (Rio Grande Valley FC) y Douglas Martínez (Real Salt Lake).

Acerca de su presencia en el listado, manifestó a Diario Diez: "Me siento feliz por la decisión que tomé, creo que es una muy buena elección y estoy emocionado por jugar". Además, agregó que "fue una decisión complicada, ya que mis padres se inclinaban más por Costa Rica, pero al final yo era el que decidía y ellos me han apoyado".

"Crecí en Honduras. Tengo recuerdos muy bonitos de los procesos juveniles que viví con la Selección, por lo que me gustaría darle una alegría a toda la gente que conozco", expresó. Además, señaló: "Nunca dije que quería jugar para Costa Rica. Solo comenté que mi familia estaba sentimentalmente involucrada ahí, cortaron mis palabras".

Finalmente, tras mencionar que le "encantaría jugar para ambas selecciones" aunque "es algo que aún no decido", concluyó: "Fue una decisión muy difícil (...). Intentaré dar lo mejor de mi para lograr el objetivo de clasificar a las Olimpiadas".