Keylor Navas ha sido uno de los legionarios que, sin escalón de por medio, saltaron al fútbol europeo para buscar allí hacerse de un nombre desde las categorías de ascenso o aquellas ligas que no son predominantes, para luego ir escalando y tal vez llegar a los equipos que ocupan las primeras planas del mundo.
Así fue el camino del guardameta tico, el cual se potenció considerablemente tras su increíble actuación con La Sele en el histórico Mundial de Brasil 2014, donde fue sensación y uno de los pilares de aquella delegación, siendo reconocido también por la prensa internacional como uno de los mejores arqueros del certamen.

Ricardo Caruso Lombardi, entrenador de varios equipos en Argentina (Fotobaires)
Sin embargo, antes de todo ello, de los laureles y las loas, de la fama que acumuló y la valía que ostentó en la cita mundialística, hubo quienes dudaron de sus capacidades. En Argentina, por ejemplo, lo rechazaron. Así lo confirmó Ricardo CarusoLombardi, entrenador de Racing de Avellaneda, cuando le ofrecieron al costarricense.
“De Keylor Navas me mostraron un video. Lo vi muy chiquitito, y no me gustaban los arqueros chiquitos“, lanzó el técnico rioplatense en diálogo con TNT Sports.”En ese momento además era medio pelo, ni se acercaba a lo que atajó en el Real Madrid“, concluyó con afiladas declaraciones.
Lo cierto es que, a pesar de las críticas, el oriundo de Pérez Zeledón escaló hasta lo más alto. Firmó con el Merengue en 2014 y fue titular en las últimas tres Champions League ganadas por su equipo. Ahora, con presente en el PSG francés, se podría decir que al final tan “medio pelo” no era.