La Federación de El Salvador sorprendió a todos con el comunicado que publicó en sus redes sociales en el que hablaban de la indisciplina de Enrico Dueñas durante la concentración de la Sub 22. Se acusó al legionario cuscatleco de haberse ido sin autorización y se le aplicó una amonestación.

En búsqueda de limpiar la imagen del futbolista, el padre del deportista salió hablar con El Gráfico y contó su verdad de esta historia. Aseguró que el jugador fue maltratado y que simplemente había salido del lugar para ir a comprarse algo para comer, debido a que la alimentación que daba la selección no era buena.

Nos mandaron una carta en donde nos dicen que no tienen pruebas y que Enrico no fue encontrado culpable. Él fue a una gasolinera y después a una farmacia y se regresó. Él fue caminando. El entrenador (Edgar Henríquez) le dijo después de eso que se fuera porque no había cumplido las reglas. Enrico le dijo que era cierto que no le dijo a nadie que había ido a una tienda pero nunca fue a una discoteco o a un bar, comenzó declarando Erick Dueñas.

Y agregó: El entrenador le dijo que no le creía y que era su decisión, fue muy rápido sin dejar que él se defendiera. Los jugadores dijeron que la versión de Enrico era verdad pero Henríquez no los escuchó. Y mi hijo me dijo que tiene cuatro semanas encerrado y que no era un animal. Son cosas muy extremas y eso no fue bueno”.

Para finalizar, apuntó: Lo ha tratado muy mal. En el caso de la comida, por ejemplo, ha sido mala. No es un problema que les de frijoles con huevo, pero la alimentación que reciben los jugadores es mala y no es suficiente. Enrico le dijo al técnico que él iba a comprar su propia comida y eso tampoco le gustó (al DT de la sub-22). Yo fui el que le dijo que si se quería quedar a pesar de las malas condiciones, que comprara su propia comida y desde que pasó eso el entrenador se puso raro con él”.