Anderlecht enfrentó este fin de semana a Club de Brujas en la fecha 20 de la Jupiter League de Bélgica. El encuentro terminó 2-2 en un gran espectáculo ofrecido por ambos oncenos donde Amir Murillo tuvo participación durante los 90 minutos. Pese al buen fútbol ofrecido, el partido se vio afectado por los insultos racistas que se escucharon desde las tribunas.

A raíz de la situación, Vincent Kompany, entrenador de Anderlecht mostró su disgusto ante el escenario vivido. "Salgo de este partido disgustado. Durante todo el partido, el cuerpo técnico y yo fuimos insultados. Insultos racistas que también fueron dirigidos a los jugadores. El día terminó mal. Me voy a reunir con mi cuerpo técnico y con las personas que me importan. No debemos vivir eso hoy en día, dijo el ex defensor.  

El club también se hizo presente con un comunicado realizado a través de su página web. "El comportamiento de algunos ensombrece el fútbol belga. En algunos momentos durante el partido, los miembros de nuestro equipo técnico fueron tratados racialmente por miembros de la audiencia. Los jugadores también escucharon insultos de naturaleza racista durante el calentamiento", escribió la institución.

"Nosotros, como sociedad, no podemos tolerar tales maldiciones resonando en un estadio de fútbol. El club quiere dejar claro, al nombrar y condenar estos incidentes, que el racismo no tiene lugar en nuestros estadios de fútbol y más allá", agregó.

Por su lado, Club de Brujas también acudió al tema vía Twitter. "El Club Brugge condenó expresamente toda forma de racismo después del partido de ayer. Tras los hechos de ayer, el Club anuncia que, junto con los servicios necesarios, hará lo necesario para identificar a los responsables y les impondrá una prohibición extrajudicial de estadio, como ya ha hecho antes".