Ismael Díaz, considerado en la actualidad, el mejor atacante que tiene Panamá, siempre fue una perla para su país, sin embargo, dos lesiones lo alejaron de las canchas por más de dos años. Detrás de un delantero que vive un gran momento con la Universidad Católica de Ecuador, existe una historia de superación, donde incluso, pensó en dejar el fútbol en alguna etapa de su carrera.

Debutó en el 2012 con Tauro FC, siendo un adolescente apenas. En ese instante, el país Canalero, conoció a una joya. Unos años más tarde, Ismael Díaz guió a Panamá a una Copa del Mundo Sub-20, donde levantó el interés del Porto FC de Portugal. "Fue una experiencia nueva, dejar el barrio, la familia y a mis padres. Se hizo más fácil cuando entendí que si quería ser profesional, este era el camino", indicó el jugador en una entrevista hacia el medio Primicias.

Sin embargo, todo se derrumbó, luego de que sufriera una lesión que lo obligaría a marcharse de Portugal. Aunque no todo era negativo, pues fichó por el Deportivo Fabril de España y fue convocado para disputar el Mundial de Rusia 2018. No obstante, después de ver minutos ante Bélgica, padeció de una contusión ósea en el cóndilo femoral externo.

“Me dolió porque veníamuy bien. Estaba en la edad donde los clubes grandes de Europa empiezan a ver a los jugadores de los clubes más chicosEsto me enseñó a ponerme a mí siempre por delante de todo, porque muchas veces, cuando estaba tocado o algo, simplemente por querer ayudar al equipo, jugaba y no me cuidaba a mí, manifestó.

Posterior a ello, volvió a Panamá, donde en su primer compromiso, recayó en una nueva lesión que lo dejó fuera por 9 meses. A pesar de ello, retornó más fuerte y en el 2021, se consagró MVP, Máximo Goleador y campeón del Torneo Clausura de la LPF. Así, llamó la atención de Universidad Católica, equipo con el cual es uno de los artilleros y comienza a levantar el interés de nuevos clubes en el mercado.