Los Juegos Olímpicos de Londres 2012 trae un sabor agridulce a la memoria de Honduras: su seleccionado de fútbol estuvo muy cerca de eliminar a Brasil en el camino a la medalla dorada. Fue derrota 3-2 frente a la Verdeamarelha, pero el que se llevó una linda historia de ese partido en la cancha del Newcastle fue Mario Martínez, quien anotó el primer gol en el partido.

 

En una transmisión en vivo, el enganche contó como se dieron los hechos: "Es una de las anécdotas que voy a contarle a mis nietos e hijos, son momentos que en tu vida no pensás que podés pasar y Dios así lo quiere. Ya en el partido con empezamos a dialogar, a bromear y, en pleno partido, me salió de pedirle la camisa, si se podía. La verdad no soy de los que me gusta andar cambiando camisa, prefiero dársela a mi familia que tal vez para ellos vale más, pero ese día imagínense tener a Marcelo... Por eso tuve el atrevimiento de pedirle la camisa. Pero se me olvidó... Seguimos jugando, terminó el partido e iba frustrado porque habíamos perdido; salí para el camerino molesto, fui uno de los primeros, pero cuando iba entrando escuché que me decían '¡Martínez, Martínez!'...

Mario marcando a Neymar en aquel partido frente a Brasil.

Mario marcando a Neymar en aquel partido frente a Brasil.

Pensé que era uno de mis compañeros y no le puse mente, ya cuando escucho a Maynor Figueroa que me dice: 'Mario, lo están llamando'... Me paré y le pregunté '¿quién?' y vino Marcelo. Los brasileños son jugadores muy humildes y carismáticos. Él me dijo que ahí estaba la camisa; la mía me la iba a traer para Honduras, pero le pregunté: '¿La ocupás?'... Me dijo: 'Sí, dámela'. Lo hice porque a veces muchos futbolistas a nivel internacional menosprecian a Honduras, entonces le pregunté si la quería y me dijo que sí. Todo empezó porque le dije: 'Sos clase de jugador, lástima porque me gusta el Barca'. Clase Marcelo", relató Martínez en una entrevista que le realizó Diario Diez.

Además, hizo memoria de su golazo y contó otro pequeño relato: "A la hora del gol, una alegría... Corría a la banca porque el profesor (Luis Fernando Suárez) y Manny (Suazo) me habían dicho que iba a anotar y viniera donde ellos a abrazarlos... Casi me lesiono la rodilla, me salió ese bonito gol y fui donde ellos".

 

 

Mario hoy se encuentra defendiendo la camisa de Marathón y está a la espera que se resuma el fútbol luego del caos generado por la pandemia del coronavirus en el país.