Keylor Navas es para muchos el mejor arquero en la historia de la Concacaf y sus números así lo reflejan. Sin embargo, estos ídolos deportivos también van más allá que el simple deporte. Fanáticos de equipos, selecciones y jugadores, hacen muchos esfuerzos para poder tener algún recuerdo de sus íconos que guardarán por el resto de sus vidas. Así le ocurrió a un niño mexicano tras la llegada de la Selección de Costa Rica a tierras mexicanas y por su puesto, uno de los más esperados fue el arquero del PSG. 

Como siempre, Keylor metido en la jugada dentro y fuera del campo entendiendo todo, también se tomó su tiempo para complacer a los fanáticos que tanto apoyo le han brindado. De manera muy amable el tico se detuvo para compartir unos segundos con alguno de ellos para luego ingresar al autobús junto al resto de sus compañeros de la Selección Nacional que los llevaría al hotel de concentración para terminar detalles antes de enfrentar a México en el Estadio Azteca.

Gran detalles de Keylor Navas 

Uno de ellos fue un pequeño niño de nacionalidad mexicana que al ver la posibilidad de acercarse a Keylor Navas, no aguantó la emoción cuando este se acercó para saludarlo y firmarle una playera. “Me llamo Adrián. Me firmó este Funko. Conocí a Keylor Navas en el Real Madrid, tengo siete años“, dijo el pequeño tratando de controlar las emociones. 

Más allá de la rivalidad deportiva cuando hay un encuentro de Eliminatorias, en este caso entre México y Costa Rica, al final es solo eso, un deporte. Y estas disciplinas trascienden lo deportivo. Como en este caso, un pequeño seguidor de la Selección de México, también siente un profundo cariño por un futbolista costarricense, que además es reconocido por el mundo como uno de los mejores en su posición.

Es importante mencionar que cada vez que juega la Selección de Costa Rica de Keylor Navas disputa un amistoso o un encuentro por Eliminatorias, suceden estas cosas. Una gran cantidad de fanáticos se reúnen en los aeropuertos y hoteles de concentración para saludar a sus ídolos y darles una muestra de cariño. Así también ha sucedido en Honduras, Estados Unidos y Panamá.