La FEDEFUT —renombrada como Federación de Futbol de Guatemala (FFG)— está viviendo días convulsos. Desde que oficializó su nuevo logo en la antesala de la Copa Oro 2025, le han llovido críticas de la afición por su polémico diseño y el escándalo no ha parado de crecer.
Sin embargo, en las últimas horas tomó una bocanada de aire al cerrar un importante “fichaje” que podría marcar un antes y un después en el fútbol guatemalteco.
Guatemala da el batacazo en Concacaf con un refuerzo mundialista
Felipe Ramos Rizo será el nuevo director del Departamento de Arbitraje de la Federación de Fútbol de Guatemala. El reconocido ex árbitro mexicano reemplazará a su compatriota, José Luis Camargo, y para ello se apartará temporalmente de su labor como analista arbitral en la cadena ESPN.
De momento, la Federación no anunció su designación de forma oficial. Pero el propio Ramos Rizo compartió un claro mensaje en sus redes sociales: “Vámonos”, escribió en el posteo que acompañó con una foto del nuevo escudo de la FFG.
En este nuevo rol, liderará un proyecto que tiene como objetivo sacar al arbitraje chapín de la crisis en la que está sumido hace años y profesionalizar aún más a sus jueces, empezando por los de la Liga Nacional. Para ello, deberá sacarle provecho a su vasta trayectoria, que lo ha erigido como uno de los árbitros más destacados de México y de la Concacaf.
Ramos Rizo, un árbitro que ha dejado huella en la región
La carrera de Felipe Ramos Rizo se extendió por una década. Debutó en 1993, su gafete FIFA lo obtuvo en 1997 y se retiró en 2003, tras dirigir tres partidos del Mundial de Corea-Japón 2002. El más emblemático fue por los cuartos de final, en el cual Brasil le ganó 2-1 a Inglaterra y expulsó a Ronaldinho.
También impartió justicia en siete finales consecutivas de Liga MX, la final de los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 —convirtiéndose en el primer árbitro de la región en lograrlo—, dos Copas Oro, dos Copas Uncaf, la Copa del Mundo Sub-20 en Nigeria y eliminatorias tanto en Asia, como en Conmebol y Concacaf.
Además, tiene experiencia como formador y la ejerce en el Colegio de Árbitros Ramos Rizo en México. Allí se capacitan más de cien silbateros en activo.