El Deportivo Saprissa atraviesa un momento inesperado. La derrota 2-0 frente al Santos de Guápiles no solo significó un revés en la tabla, sino que también evidenció un problema más profundo dentro del camerino tibaseño, según confesó su propio técnico, Paulo César Wanchope.
Apenas en su tercer partido al mando del equipo, el histórico exjugador y ahora timonel morado enfrentó su primer golpe serio. Aunque en conferencia de prensa mantuvo su clásica compostura, no ocultó la frustración interna que vive el plantel.
¿Cuál es el problema dentro del camerino que reveló Wanchope?
“Hay frustración en el camerino, es obvio. Fue un partido que controlamos, tuvimos muchas opciones de gol y presencia en el área. No hay explicación. Tuvimos las opciones como para ganar”, confesó Paulo Wanchope, quien se mostró dolido por el resultado.
El técnico reconoció que el equipo fue víctima de errores puntuales, pero graves. En especial, la falta de concentración en los primeros minutos del juego: “Tuvimos una desatención en el primer minuto y cayó el gol”.
Luego, agregó sobre como los terminó golpeando el 2-0 en contra en un momento crucial del encuentro: “Lo del segundo gol también nos afectó. Pero repito, el control del partido lo tuvimos. Solo que no supimos definir”.
Crisis de arranque y presión inmediata
Más allá del resultado, preocupa el estado anímico y la falta de reacción de un equipo acostumbrado a dominar. La frustración de los jugadores, según Wanchope, ya se hace sentir, y con una seguidilla de partidos en puerta, el margen de maniobra se reduce considerablemente.
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“Queda levantar la cabeza, luchar con orgullo y perseverancia”, dijo el técnico, en lo que suena más a un llamado interno que a una declaración para la galería.
