El Real Madrid, un club habituado a la grandeza en la Champions League, ha tenido sus momentos de pesadilla contra jugadores provenientes de regiones que no suelen ser potencias futbolísticas tradicionales. Uno de esos episodios tiene nombre y apellido: Wálter Centeno.
El costarricense dejó una huella imborrable en la memoria del equipo blanco en la máxima competición europea, y hasta el día de hoy, su nombre sigue resonando cuando se habla de jugadores de la Concacaf que han logrado hacerle daño al gigante madrileño.
Esto se recuerda debido a que, recientemente, el delantero canadiense Jonathan David se unió a un selecto grupo de jugadores de la Concacaf que han logrado marcarle al Real Madrid en Champions. Su gol, que selló la derrota del equipo español por 1-0 frente al Lille, lo catapultó a una lista de la que también forman parte Christian Pulisic y Alphonso Davies.
El recuerdo del Real Madrid con el Paté Centeno
Walter Centeno, recordado como uno de los grandes del fútbol costarricense, hizo historia en 2002 cuando anotó uno de los goles más inesperados y memorables ante el Real Madrid con la camiseta del AEK de Atenas. Paté logró lo que parecía imposible en el Santiago Bernabéu, al enfrentarse al equipo de los galácticos, una escuadra que contaba con leyendas como Zidane, Ronaldo, Beckham y Raúl.
El tweet de MisterChip recordando el gol de Paté Centeno al Real Madrid. (Foto: X)
El impacto del gol de Centeno fue profundo porque representaba algo más que una anotación. Para la Concacaf, una región que no se asocia tradicionalmente con éxitos en Europa, marcarle al Real Madrid en su propio terreno fue un logro que trascendió fronteras. Para los aficionados del fútbol costarricense, fue un momento de orgullo y una reafirmación de que, incluso ante los más grandes, jugadores de esta zona pueden brillar.
La historia de Paté frente al Real Madrid sigue siendo una referencia cuando se habla de actuaciones memorables de jugadores de la Concacaf en la Champions. Su capacidad para imponerse en un escenario tan imponente como el Bernabéu para conseguir un mítico 2-2.
