Erick Torres está a punto de cumplir la sanción de dos años impuesta tras su resultado positivo en una prueba de dopaje. Su contrato con el Club Sport Herediano se extiende hasta finales del 2025, pero el gerente deportivo Jafet Soto ya ha dejado en claro que no cuenta con él y que lo dejaría en libertad como agente libre.
En este contexto, la incertidumbre sobre su futuro se ha intensificado, con el Santos de Guápiles emergiendo como su posible destino. Ronny Cortés, presidente del club, ha asegurado en reiteradas oportunidades que tiene todo arreglado con el delantero mexicano. Según sus propias declaraciones, Cubo ya le habría dado su palabra para sumarse al club una vez que termine su suspensión.
Sin embargo, esta versión contrasta con las recientes declaraciones del futbolista, quien ha manifestado su intención de esperar el llamado de Jafet Soto para volver a entrenar con Herediano. Lo que pocos conocen de esta historia es que Erick Torres tiene una deuda pendiente con Ronny Cortés.
¿Cuál es la trama secreta entre Cubo Torres y el presidente de Santos?
Cuando se confirmó que estaría dos años sin jugar, el presidente de Santos de Guápiles y su hijo le ofrecieron un empleo en su empresa de bienes raíces, permitiéndole mantenerse económicamente activo durante su sanción. Durante ese tiempo, el delantero mexicano percibió un salario considerable trabajando en el sector inmobiliario.
Cubo Torres junto al hijo del presidente de Santos. (Foto: Instagram)
Según informes provenientes de medios mexicanos, este vínculo con la empresa de bienes raíces estaría directamente relacionado con su posible llegada al Santos de Guápiles. Se especula que el empleo ofrecido a Torres fue parte de un acuerdo implícito en el que, a cambio del respaldo económico, el jugador debía comprometerse a unirse al equipo guapileño una vez que su sanción llegara a su fin.
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Si bien todavía no hay un anuncio oficial, todo indica que el futuro de Cubo Torres está prácticamente sellado. La relación que construyó con Ronny Cortés y su hijo durante su suspensión podría ser determinante en su próximo movimiento dentro del fútbol costarricense.
